EL GEO600 COMIENZA UNA BUSQUEDA CONTINUA DE ONDAS GRAVITATORIAS
http://www.amazings.com/ciencia/noticias/040806a.html
El detector germano-británico de ondas gravitatorias GEO600 ha comenzado a hacer mediciones de manera continua, en el marco de un ambicioso proyecto de investigación. Los investigadores se muestran optimistas y creen que serán capaces de observar un fenómeno nunca antes visto: las Ondas Gravitatorias. Éstas constituyen una de las grandes predicciones no sometidas aún a prueba, de la Teoría de la Relatividad de Einstein.
Las ondas gravitatorias pueden ser usadas para hacer "astronomía oscura", estudiando aquellos aspectos del universo para los que la astronomía ordinaria que usa la luz (y el resto del espectro electromagnético) puede sólo proveer información limitada.
"Si se manifiesta una supernova en nuestra vecindad durante el próximo par de meses, nuestras posibilidades de detectar y medir las ondas gravitatorias resultantes son buenas", señala el profesor Karsten Danzmann, jefe del Centro Internacional para la Física Gravitatoria, que es gestionado conjuntamente por la Sociedad Max Planck y por la Universidad de Hannover. "Se ha dado el primer paso hacia la astronomía de ondas gravitatorias, lo que nos permitirá al fin observar el 96 por ciento de nuestro universo que había estado escondido a nuestro escrutinio hasta ahora". Los datos se obtienen de manera conjunta con los dos observatorios estadounidenses LIGO.
La sensibilidad del detector GEO600 ha sido mejorada continuamente desde las pruebas iniciales de su funcionamiento efectuadas en 2002. Hoy su sensibilidad se ha incrementado en un factor de 3.000, y puede detectar eventos a distancias muy superiores a la existente entre nosotros y nuestro vecino galáctico, la galaxia de Andrómeda.
Como se ha dicho, la medición directa de ondas gravitatorias es uno de los desafíos más profundos de la física moderna ya que nos permitirá observar el hasta ahora inaccesible 96 por ciento de nuestro universo. Se está abriendo un nuevo capítulo en la larga historia de la astronomía con la observación directa del "lado oscuro" de nuestro universo: agujeros negros, materia oscura y las reverberaciones del Big
Bang.
El GEO600 es el más moderno interferómetro láser Michelson en el mundo. Sus rayos láser pasan por dos tubos al vacío, instalados bajo tierra, que miden 600 metros de largo. El detector de ondas gravitatorias incorpora láseres de estabilidad incomparable, óptica libre de absorción, amortiguación altamente sofisticada ante
vibraciones, y un innovador sistema de mejora de señales. La tecnología desarrollada en Hannover será también implantada en la próxima generación de observatorios LIGO estadounidenses.
El detector germano-británico de ondas gravitatorias GEO600 ha comenzado a hacer mediciones de manera continua, en el marco de un ambicioso proyecto de investigación. Los investigadores se muestran optimistas y creen que serán capaces de observar un fenómeno nunca antes visto: las Ondas Gravitatorias. Éstas constituyen una de las grandes predicciones no sometidas aún a prueba, de la Teoría de la Relatividad de Einstein.
Las ondas gravitatorias pueden ser usadas para hacer "astronomía oscura", estudiando aquellos aspectos del universo para los que la astronomía ordinaria que usa la luz (y el resto del espectro electromagnético) puede sólo proveer información limitada.
"Si se manifiesta una supernova en nuestra vecindad durante el próximo par de meses, nuestras posibilidades de detectar y medir las ondas gravitatorias resultantes son buenas", señala el profesor Karsten Danzmann, jefe del Centro Internacional para la Física Gravitatoria, que es gestionado conjuntamente por la Sociedad Max Planck y por la Universidad de Hannover. "Se ha dado el primer paso hacia la astronomía de ondas gravitatorias, lo que nos permitirá al fin observar el 96 por ciento de nuestro universo que había estado escondido a nuestro escrutinio hasta ahora". Los datos se obtienen de manera conjunta con los dos observatorios estadounidenses LIGO.
La sensibilidad del detector GEO600 ha sido mejorada continuamente desde las pruebas iniciales de su funcionamiento efectuadas en 2002. Hoy su sensibilidad se ha incrementado en un factor de 3.000, y puede detectar eventos a distancias muy superiores a la existente entre nosotros y nuestro vecino galáctico, la galaxia de Andrómeda.
Como se ha dicho, la medición directa de ondas gravitatorias es uno de los desafíos más profundos de la física moderna ya que nos permitirá observar el hasta ahora inaccesible 96 por ciento de nuestro universo. Se está abriendo un nuevo capítulo en la larga historia de la astronomía con la observación directa del "lado oscuro" de nuestro universo: agujeros negros, materia oscura y las reverberaciones del Big
Bang.
El GEO600 es el más moderno interferómetro láser Michelson en el mundo. Sus rayos láser pasan por dos tubos al vacío, instalados bajo tierra, que miden 600 metros de largo. El detector de ondas gravitatorias incorpora láseres de estabilidad incomparable, óptica libre de absorción, amortiguación altamente sofisticada ante
vibraciones, y un innovador sistema de mejora de señales. La tecnología desarrollada en Hannover será también implantada en la próxima generación de observatorios LIGO estadounidenses.
Comments